La propuesta surge de una vecina de la ciudad que convocó a interesados a participar a través de las redes sociales. Muy pronto se formó un equipo de vecinos que conforman lo que podríamos denominar “Mesa de Planificación” de las actividades que se publican en la web bajo el Logo de “A Limpiar Ushuaia”.
A partir de una realidad local que molesta -el estado en que se encuentran algunos espacios públicos- se trabajó sobre una manera constructiva de lograr que los vecinos se auto-convoquen para ocuparse de mejorar los espacios públicos de su barrio.
Nuestro grupo no busca responsables del estado en que se encuentran las plazas, espacios verdes y baldíos. Simplemente, nos hacemos responsables de la parte que sí nos compete, y nos ponemos en acción para cambiar aquello que nos disgusta.
Queremos generar compromiso de cada persona con su barrio, construir redes que nos permitan compartir recursos y experiencias, aprender haciendo y hacer aprendiendo, crear una sinergia que permita -en el futuro- que cada sector logre el impulso necesario para que “A Limpiar Ushuaia” deje de ser necesario.
Y para comenzar, fue necesario derribar un mito: La idea de que es necesario dejar de lado responsabilidades y obligaciones personales para colaborar con un proyecto comunitario. La participación es posible de diferentes maneras: Proponiéndose como líder voluntario, participando de las actividades que se proponen, o donado insumos o servicios necesarios para que el proyecto pueda avanzar.
Así nació “A Limpiar Ushuaia”, convocando de esta manera:
“El día que quieras, a la hora que puedas…
Organizá la limpieza de tu barrio, plaza o espacio verde,
y sé parte del cambio que querés ver en Ushuaia.”